Particularmente el verano es la temporada del año que mas detesto o que más infeliz me hace. Es detestable porque no hay cosa más odiosa en el mundo que estar asechado sin tregua por ese demoniaco sol ardiente que caga al mundo. En verano es imposible no estar sudando todo el día, hay que cambiarse de ropa a cada momento, no se puede salir a la calle, tu piel se tiñe de un color oscuro indeseable que es muy probable que sea perpetuo, no hay sombra, no hay aire fresco, el aire viene caliente, todo está caliente. En verano todo se torna caliente, todo viene caliente y la calentura (como es obvio) también se vuelca sobre nosotros los jóvenes. Lo único rescatable acerca de esa temporada del año es que en verano la fealdad parece atenuarse o esconderse, como maquillarse. No sé si solo yo lo he notado pero, al parecer en verano todas las chicas se ven más buenas, más apetecibles, como más atractivas. Puede ser que las chicas se vean mucho más lindas o atractivas, o es que en verano las chicas mas lindas que se encontraban invernando o pernoctando por un largo tiempo, salen para deslumbrar con su belleza en esa época del año calurosa, o es que por una razón inexplicable (y muy incierta como improbable), las chicas que son, más bien, desgraciadas, no muy lindas o simplemente feas, gracias al verano ya no lucen tan feas o lucen menos feas. Quizá se deba todo al calor descomunal del verano. El calor hace que se usen ropas más ligeras, ropas que dejan al descubierto parte de la integridad física de las personas, y quizá con una buena minifalda o un buen top que despierten la creatividad imaginaria de todos los muchos arrechos que habemos por el mundo; la belleza del rostro puede quedar de lado (todo esto si es que estás arrecho). Quizá se trate de una mala o inexacta percepción de la realidad. Quizá se trate de un error, de una falsa representación de la realidad pero, en verano me es mucho más fácil encontrar o toparme por la calle con chicas lindas que con chicas feas que son mucho más frecuentes en el invierno por ejemplo. El tan delicioso y llevadero invierno que es mi época favorita del año (desafortunadamente).
Sin embargo, para que el presente estudio sea considerado como una hipótesis científica (si cabe), urge la necesidad de puntualizar ciertas aclaraciones, como la real distinción que se rige entre las chicas que son lindas y las que son simplemente atractivas. Las primeras son mujeres que se caracterizan por una belleza irreprochable. Son en términos estrictos (y también latos), bellas. Bellas de rostro (esencialmente). No necesariamente portadoras de un buen cuerpo (ello no es indispensable, no le es exigible), sin embargo, es muy viable que sean mujeres de rostro delicado y hermoso, y que también tengan un cuerpo delgado y bien cuidado. Es decir, el ser bellas no las exime de mantener un cuerpo atractivo. Las chichas son mas lindas si tienen el cabello largo y lacio (a mi modesto modo de pensar, y resaltando mis preferencias). Por otro lado, las chicas atractivas se caracterizan principalmente por su buen cuerpo. Un cuerpo delgado, tonificado, bien cuidado, todo en su sitio. No necesariamente son portadoras de un rostro bello, ya que si fueran bellas, estarían dentro del clan de chicas lindas, y no habría distinción alguna.
Tampoco no hay que ser tan positivistas, ni diplomáticos y ver todo color de rosas. Eso no me caracteriza, soy más bien alguien mezquino y cruel y tengo que decir que, a pesar de que en verano la posibilidad de ver chicas lindas y atractivas es mucho más probable y la fealdad parece atenuarse, resulta justo decir, también, que no todas sufren este cambio o transformación bienhechora. Es decir, no siempre todas lucen lindas o atractivas (según sea el caso), o no a todas se les puede camuflar su obvia fealdad. Existen unas cuantas (muchas) personas (chicas y chicos) feas que ni siquiera en verano lucen atractivas (yo me incluyo en ese grupo) y mucho menos pueden llegar a lucir bellas. Eso es imposible. Estas chicas aunque se pongan las putifaldas más diminutas del mundo, aunque usen los tops más provocadores o los bikinis más inescrupulosos que se puedan imaginar, no van a llegar, siquiera, a lucir atractivas, o si lo logran, ese atractivo se va a perder o distorsionar por su obvia y remarcada fealdad facial o corporal en la mayoría de los casos, considerando lo bien que nos gusta comer a los peruanos.
En conclusión: Existen chicas lindas, que son chicas casi perfectas y que en verano lucen mucho más bellas aun. Existen chicas que no llegan a ser bellas pero por sus exuberantes cuerpos y, especialmente en verano, lucen atractivas. Las chicas lindas pueden también ser chicas atractivas, pero para las chicas atractivas es muy difícil llegar a ser lindas; y por último, existen chicas feas que no tienen arreglo alguno, que están perdidas, sentencias y destinadas a su mala suerte.
Resulta más que obvio decir que lo que todo hombre busca es que una chica linda se le cruce por el camino ¿no? De no darse el caso, al menos que una chica atractiva se nos cruce por el camino, pero de ningún modo una fea.
Este lugar está destinado a la indecorosa e impresentable industria (para nada trabajosa) de hacer públicos todos mis errores, mis constantes fracasos, mis sueños (que no son pocos), mis desilusiones (amorosas), mis males, mis penas, mis fantasías, mis risas, mis crueles verdades y mis mal elaboradas ficciones. En fin, es una forma de desnudarme mediática (o cobardemente) ya que no tengo el valor para hacerlo de otra forma más directa o personal, sin temerle a las consecuencias inmediatas.

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